La señora doña Juana Paula Manso de Norhona.
Señores:
Sin preparación alguna, inspirándome á las palabras del respetable doctor Alsina y del sello ofrecido al Circulo Literario por el señor Cataldi, que representa el jénio de la ciencia anonadando la discordia, como la razón anonada todo interés mezquino, añadiré algunas palabras que serán como el programa de nuestros futuros trabajos, y recordando los conceptos de una escritora francesa, de Mme. De Girardin, os diré que fijemos en las paredes de esta casa las palabras: integridad, que es el crédito; concordia, que es la unión; industria, que es la vida; y además paciencia, que es el fénix, caridad, que es la fraternidad democrática; perseverancia, que es el secreto del triunfo y del porvenir, verdad, y veo realizada en la instalación de esta sociedad, porque es la profecía que ahora hace veinte y tres años se desprendía de la lira inspirada de un joven poeta, el doctor Gutiérrez.
Que son perdidos instantes
De pueblos que ayer nacieron
Y que acaso se perdieron
Por estraviados caminos?
Que son las gotas de sangre
Que salpicaron el suelo,
Que son el llanto y el duelo
Que algúna vez padecimos?
Qué son un grano de arena
De la ancha playa de un rio
Una gota de rocio
Entre-mezclada en los mares!
Así, bendito del hombre
Que marcha siempre brioso
Por el sendero espinoso
Que recto va al porvenir!
Perseveremos pues, y el porvenir es nuestro! Solo me resta ahora felicitar cordialmente á los que lo han alcanzado después de tantos años de espatriación.
Discurso pronunciado por Juana Manso en la inauguración del Círculo Literario, La Revista de Buenos Aires, Bs.As., 1864, pag. 280. Ortografía original.